Por: Joel Suero
El espíritu democrático peledeista quedó quebrantado el pasado domingo en Santo Domingo Oeste, de tal forma que perdurará hasta el surgimiento de una nueva generación.
Los dirigentes peledeistas que decidieron optar por una nominación como regidores están en el derecho de impugnar todo el proceso en esta localidad.
Pero no es sólo impugnar por impugnar, sino más bien sembrar un precedente de respeto y lealtad. Que no vuelva a suceder lo que a vocación de todos ya se sabe.
No es correcto hacer de la vista gorda y dejar todo así, quizás por amedrentamiento de un empleo u otros favores pendientes a la dirección del partido Oeste.
Una impugnación por ante el Tribunal Superior Electoral y ante el mismo partido morado, debe ser visto con mucho cuidado por las altas instancias, decisión que pueda afectar a personas específicas pero que ponga un claro ejemplo de respeto al compañero.
El pasado proceso electoral peledeista dejo claramente establecido el endiosamiento que muchos dirigentes han dado una sola persona, en ocasiones le llaman "líder".
Las votaciones concluyeron el domingo, más el proceso esta en sus manos, IMPUGNEN, es la vía correcta.
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