México.- El ex presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, afirmó este jueves en esta ciudad que para evitar que el pesimismo tome cuerpo en la región, América Latina tiene que trabajar con miras a definir y poner en ejecución un nuevo modelo de desarrollo, que debe estar en armonía y consonancia con una consolidación del Estado social y democrático y de derecho.
Fernández hizo el planteamiento en el marco de una conferencia magistral que dictó en el IV Foro sobre la Democracia Latinoamericana, ocasión en la que abordó el tema “Pobreza y Crisis de Representación: ¿hacia una mayor o menor cohesión social en el 2020?”, teniendo como moderadora y comentarista a la académica argentina-española, Flavia Freidenberg.
Según explica una nota de prensa, el ex jefe de Estado explicó que para lograr esa meta, América Latina debe ajustarse a la idea de que se necesita una combinación de dos modelos: uno de trabajo intensivo y otro de capital intensivo, con una fuerte base tecnológica, lo que permitirá tener bienes y servicios con mayor valor agregado.
“Eso generará mayor volumen de riqueza y, por tanto, se incrementará el Producto Interno Bruto anual, lo que dará lugar a un incremento per cápita y a mayor productividad”, indicó Fernández.
Insistió en que el futuro económico y social de la región está ligado a la capacidad de la misma de generar mayor productividad, competitividad e innovación, en un marco de interdependencia global.
Destaca avances
En otro aspecto de su intervención, Fernández reconoció que en la región todavía se evidencian niveles preocupantes de desigualdad social, inseguridad, debilidad institucional que generan inquietud, pero aseguró que esa situación tiene mucho que ver con los nuevos retos que la democracia va experimentando.
“Yo dirigía que todo esto tiene que ver con el tema de la legitimidad de acceso al poder, la cual se transforma en demandas económicas y sociales, y al mismo tiempo tiene que ver con fortalecimiento institucional y participación ciudadana”, sostuvo.
En lo concerniente a participación ciudadana, fortalecimiento institucional y transparencia, el ex gobernante afirmó que los países de la región han avanzado bastante en reformas constitucionales y aprobación de leyes que limitan el ejerció de poder. “Si antes en América Latina se hablaba de un presidencialismo crónico, hoy día las reformas constitucionales que se han hecho lo que procuran es una limitación del ejercicio del poder, auspiciadas por los propios Estados”, indicó.
A ese respecto, recordó que hasta hace unos años, en América Latina no existía como norma el referéndum revocatorio que existe en algunas constituciones de la región, como tampoco existían las iniciativas populares legislativas ni los tribunales constitucionales que hoy apuntalan los derechos ciudadanos.
De igual manera, destacó la importancia de las leyes de acceso a la información pública, de las que dijo constituyen la manera de poder garantizar transparencia, tras señalar que en muchos países también se han promulgado legislaciones de licitación pública que le han puesto fin a la práctica de entregar obras grado a grado.
“De manera que esto ha representado un gran avance, aunque todavía insuficiente, porque siempre partimos de que la democracia es un experimento permanentemente incluso”, puntualizó Fernández.
Sobre las protestas
En cuanto a las protestas que se escenifican en algunos países de la región latinoamericana, Fernández observó que las mismas tienen un carácter global, tras señalar que permanentemente hay acciones de ese tipo en países tan distantes del continente como Indonesia y Tailandia.
“Las protestas no son en Haití; son en Brasil y, por tanto, obedecen a una naturaleza distinta a las tradicionales protestas sociales que se daban en América Latina y en otras partes del mundo”, proclamó el ex jefe de Estado dominicano.
Fernández sostuvo que como resultado del proceso de globalización, y debido a la baja presión fiscal, en muchos países de América Latina, entre ellos la República Dominicana, hay una sobrecarga de demandas sociales y una incapacidad de los gobiernos para responderlas.
“En México y en República Dominicana hay una presión fiscal de apenas un 13 por ciento… Son Estados pobres tratando de responder a crecientes demandas de una estructura social que se ha ido mutando desde pobre hacia una clase media”, afirmó.
0 comentarios:
Publicar un comentario